El espacio que he elegido es un supermercado. Aunque cuenta con señalización que diferencia las distintas zonas de productos, puede resultar un tanto confuso si no eres un visitante frecuente.

Para orientar a un posible usuario, he seleccionado elementos que se destacan visualmente. En este caso, la charcutería en el centro comercial es muy visible desde la entrada debido a su color rosa, que sobresale entre los demás elementos del entorno. Luego, para encontrar el camino, basta con seguir recto hasta el final de ese pasillo y, al llegar al final, girar a la izquierda y cambiar al pasillo número 2.

En mi opinión, es fundamental utilizar elementos que se destaquen visualmente para tener una buena relación con el entorno y poder orientarse de manera efectiva. Por lo tanto, he empleado la referencia de la charcutería con su color rosa como un punto de referencia. Considero que un refuerzo visual puede ser más útil para la orientación que cualquier otro tipo de señalización.